LA VERSATILIDAD

El mago de las palabras nos enseña en su libro iniciacion al mundo de las palabras, que versatilidad, es el recurso fundamental de cualquier mago en las artes que sea. Es el talento de volverse de girarse, de asimilar lo nuevo, la sorpresa. Es la versatilidad una de las cualidades que hace que persigamos un autor, un actor un pintor , un torero. El cuentero, se ubica en un lugar temporal dentro de los lugares actorales, de tiempo pasado, todo lo que cuenta ya terminó de suceder, es finito, acabado, y el narrador visita las emociones pero con la información de lo ocurrido luego . El actor de teatro actua en presente, no sabe lo que le va a ocurrir a él o ella, la emoción le está pasando ahí, su sitio es presente en la emoción; yo la visito, la miro, la vivencio pero desde el futuro, ella ya no es el mundo, está ubicada en el relato con una función concreta, como en la vida que todo desde afuera, se acomoda. Y entonces, ubicada en el futuro , cómo puedo yo lograr , cómo desde el relato que cuento,cómo desde el lugar emocional en que lo cuento, una versatilidad? . Dónde esta la variedad?, y primero percibo una especie de vida mítica del narrador donde cuenta los lugares en que conoció aquello que va a contar, es decir es necesario demostrar como un título de obra literaria "todos los posibles narrativos"" que te habitan, Siempre soy yo pero no solo actua el yo que muestro, .... construyo voces, tonos, entonaciones y sacos de lenguaje que corresponden a cada historia, como bolsas de juguetes en donde tenéss desde un lego, hasta un juego de computador y vos como narrador tenés que ser posible, tenés una voz a la que esa historia le tiene que sonar cierta, vivida, carnal. Ese narrador, esa voz, ese, como dice Pawel, Rol que asumimos nos llevaría a pensar que hay muchos posibles narradores que habitan a la carolina que soy, que no resulta un ser unidimensional sino un ente narrador, trasformista, que se ejercita puliendo todos los posibles yo misma que puedo ser, es decir realizo a través del ejercicio de contar, una labor de prueba y error, prueba y acierto, prueba y...., donde los posibles narradores, los posibles yo misma que soy, construyen un universo sólido y creible, donde aparte de evidenciar el cuento, me descubro con la desnudez y la desverguenza. Ese es el narrador que me apetece, que explora sus posibles narrativos, y siempre está persiguiendo un relato escurridizo, y de esa manera en la persecusión de algo casi incontable, provoca el encuentro con los momentos de sentido que se producen en los cuentos. Oía a un actor en el programa del actors studio, que decía que finalmente en escena lo que cuenta no es todo lo que te preparaste, sino todo es que sale de vos así, animal, que querés esconder, y eso, lo que no querés dejar ver, es lo que verdaderamente cuenta al personaje, lo rellena lo situa. Al narrar me encuentro con cosas de mi que creo haber superado, o que no termino de entender, en ambos sentidos la sensación de estar sentada en una calabaza chupándome un palito ocasionalmente me resulta casi enternecedora. Sin embargo, cada narración te revela de vos misma una posible narradora, una figura que se asienta y se situa con la libertad de existir, aunque sea solo en el mundo de los posibles. Carolina la cínica, la volatil, Carolina la melancólica, la descarada, y un dia de todo un poco y un día en un tono preciso. En la busqueda de los sentidos, todo se hace relativo y absoluto, pero en los andares que olfateo como un sabueso de los caminos, persigo senderos de trabajo para conservar el entusiasmo del viajero, del explorador, del posible narrador.