Se miente más de la cuenta
por falta de fantasía,
también la verdad se inventa. Machado, en proverbios y cantares
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GALAXIAS
mi corazón está lleno y quebrado potente y frágil lleno de esperanzas y de fracasos, mi memoria llena de recuerdos y de olvidos, de potencia y de impaciencia. Los viajes tienen esa facultad de decretarse en su inicio como búsqueda y salida de tu casa para llevarte a un lugar nuevo o conocido que te ayude a ampliar el destino de tus pasos, mi cuerpo ha recorrido este paseo trasatlántico con el incansable gusto con que se disfruta el cuerpo amado, con que se besa una boca que se vuelve un mundo. A mi el fin del mundo del diciembre pasado me sentó muy bien, los planetas de mi galaxia han decidido emprender un camino nuevo que descubre soles y permite novas. A ratos me encuentro con mis agujeros negros, en principio asustan porque tanta oscuridad , aterra, pero si los transito, si por un momento me dejo caer en su gravedad, desemboco con mi nave entera o con lo que pueda en un amanecer sorprendente, en una psicodelia que preña y que multiplica, en un espíritu que me da noción de eternidad. Nunca antes el tiempo me había andado hacia atrás y miro la vida con la ilusión de los 17 pero con la serenidad de los cuarenta, que se venga el mundo por mis poros, que se ericen los caminos frente a mis pasos, que venga todo, que me lo devoro.
Y mientras tu anunciabas la entrada, yo colgaba en face esta pregunta: ¿Será que volver a la raíz es asumir la necesaria urgencia de algún nido? Un beso, viajera Un beso, amiga nido y casa
Mi corazón quebrado está lleno de recuerdos y de olvidos, de potencias e impaciencias. Mi cuerpo ha dado la vuelta a lo conocido.
Con el incansable gusto con que se disfruta el cuerpo amado, con que se besa una boca que se vuelve un mundo recorro un nuevo camino en mi galaxia donde descubro nuevos soles y planetas y donde me estallan sin miedo mis viejas estrellas en supernovas
A ratos transito por mis agujeros negros, y tanta oscuridad aterra. Pero si me dejo arrastrar por su fuerza desemboco, mi nave dañada pero entera , en un amanecer sorprendente que preña y multiplica mi espíritu en guiños de lo eterno
Nunca antes el tiempo me había andado hacia atrás. Miro la vida con la ilusión de mis diecisiete y con la serenidad de mis cuarenta. Que se venga el mundo por mis poros. Que se ericen los caminos a mi paso. Que venga todo, que me lo devoro.
mi corazón está lleno y quebrado potente y frágil lleno de esperanzas y de fracasos, mi memoria llena de recuerdos y de olvidos, de potencia y de impaciencia. Los viajes tienen esa facultad de decretarse en su inicio como búsqueda y salida de tu casa para llevarte a un lugar nuevo o conocido que te ayude a ampliar el destino de tus pasos, mi cuerpo ha recorrido este paseo trasatlántico con el incansable gusto con que se disfruta el cuerpo amado, con que se besa una boca que se vuelve un mundo. A mi el fin del mundo del diciembre pasado me sentó muy bien, los planetas de mi galaxia han decidido emprender un camino nuevo que descubre soles y permite novas. A ratos me encuentro con mis agujeros negros, en principio asustan porque tanta oscuridad , aterra, pero si los transito, si por un momento me dejo caer en su gravedad, desemboco con mi nave entera o con lo que pueda en un amanecer sorprendente, en una psicodelia que preña y que multiplica, en un espíritu que me da noción de eternidad. Nunca antes el tiempo me había andado hacia atrás y miro la vida con la ilusión de los 17 pero con la serenidad de los cuarenta, que se venga el mundo por mis poros, que se ericen los caminos frente a mis pasos, que venga todo, que me lo devoro.
Comentarios
¿Será que volver a la raíz es asumir la necesaria urgencia de algún nido?
Un beso, viajera
Un beso, amiga nido y casa
de recuerdos y de olvidos,
de potencias e impaciencias.
Mi cuerpo ha dado la vuelta a lo conocido.
Con el incansable gusto con que se disfruta el cuerpo amado,
con que se besa una boca que se vuelve un mundo
recorro un nuevo camino en mi galaxia
donde descubro nuevos soles y planetas
y donde me estallan sin miedo mis viejas estrellas en supernovas
A ratos transito por mis agujeros negros,
y tanta oscuridad aterra.
Pero si me dejo arrastrar por su fuerza
desemboco, mi nave dañada pero entera ,
en un amanecer sorprendente
que preña y multiplica mi espíritu en guiños de lo eterno
Nunca antes el tiempo me había andado hacia atrás.
Miro la vida con la ilusión de mis diecisiete
y con la serenidad de mis cuarenta.
Que se venga el mundo por mis poros.
Que se ericen los caminos a mi paso.
Que venga todo, que me lo devoro.
y donde me estallan sin miedo mis viejas estrellas en etéreas supernovas